miércoles, 25 de julio de 2012

PARA TODA LA VIDA


¿Me quieres, amor, me quieres? 

¡Sí, para toda la vida!... 


y era yo quien preguntaba, 
siempre soñando una espina, 
siempre rondando una duda, 
siempre imaginando heridas. 
"¿Me quieres, amor, me quieres?" 
¡Sí, para toda la vida!... 

Tardes, madrugadas, noches, 
mañanas y mediodías; 

en el  balcónen la calle, 

en el sueño, en la vigilia, 
siempre, siempre preguntando, 
corazón, si me querías, 
y de pronto, no sé cómo, 
sin una razón precisa, 
mi voz amarga y cansada 
se fue quedando dormida, 
y cayó sobre mi alma 
una lluvia dulce y fina 
que se fue cristalizando 
en nieve delgada y fría. 

y ya no pregunté más, 
corazón, si me querías. 
Ahora, eres tú quien se queja, 
quien pregunta y quien suspira 
¿Me quieres, amor, me quieres?, 
me dices con voz dolida... 

y yo, de la misma forma 
con que tú me respondías, 
escondiendo la verdad 
debajo de la mentira, 
 digo ausente y lejano: 
—¡Sí, para toda la vida!...

                           Rafael de León 
                            Español

martes, 24 de julio de 2012

TE NECESITO, TE SIENTO, TE AMO.







Te amo. Lo repito cada día como el tiempo 
repite en sus latidos el paso de las horas.
Y por amarte, sufro.

Sufro porque no veo a cada instante
tu cálida presencia, porque ignoro en qué piensas
cuando de mí estás lejos y qué hacen tus manos
cuando no pueden acariciar las mías.
Te necesito ¿sabes?
como el pan que me como
y el aire en que me muevo.

Me enciendo como el sol cuando te miro,
lloro como la lluvia si te alejas,
y todas mis estrellas se me apagan y todos 
mis rosales se deshojan si no escucho tu voz.

Y no me basta, sabes, recordarte.
Necesito el apoyo de tu cuerpo,
la hondura de tus labios, 
el fuego de tu instinto.

Sufro por esos días que llegan sin traerme 
tu presencia,
 por esa soledad que me aprisiona en invisibles 
rejas si renuncias a verme;
por todo lo que podría ser y que no es,
por todo lo que sueño y deseo inútilmente.

Y me basta saberte viviendo, 
respirando mis palabras.
 Y temo perderte y no encontrarte
en el ardiente clima de mi amor.

La vida se desborda, se desata por 
todos los caminos de mi sangre
cuando llegas y vienes a mi encuentro.

Y si te vas, la sed, furiosamente me azota,
 hasta que siento que las heridas 
-labios insepultos-
sorben el agua oscura de mi llanto.

No digas que me amas como yo te amo a ti.
Me mentirías.
El amor que me sientes es tan sólo un espejo
que refleja una parte del que yo he hecho
mío a través de mis años más hermosos.

Sin ti ya no hay caminos que sirvan
 a mi paso,
ni noches que merezcan oscurecer los ojos
que encendiste al mirarme,
ni tallos que resistan ser cortados
inesperadamente por esas manos mías, 
 esas flores que morirán tan sólo
cuando olvides regarlas
con el puro contacto de las tuyas.

Te amo por todo cuanto niegas,
por todo cuanto das,
por lo que olvidas y recuerdas,
lo que gozas y sufres,
lo que dices y callas, y porque sólo tú
has dado vida al árbol de mi amor
y solo tú podrás talar sus ramas.

                            Montserrat Vayreda
                         Español

lunes, 23 de julio de 2012

TÚ NO SABES AMAR




Tú no sabes amar; ¿acaso intentas
darme calor con tu mirada triste?
El amor nada vale sin tormentas,
¡sin tempestades… el amor no existe!

Y sin embargo, ¿dices que me amas?
No, no es el amor lo que hacia mí te mueve:
el Amor es un sol hecho de llamas,
y en los soles jamás cuaja la nieve.

¡El amor es volcán, es rayo, es lumbre,
y debe ser devorador, intenso,
debe ser huracán, debe ser cumbre…
debe alzarse hasta Dios como el incienso!

¿Pero tú piensas que el amor es frío?
¿Que ha de asomar en ojos siempre yertos?
¡Con tu anémico amor… anda, bien mío,
anda al osario a enamorar los muertos!
                                                  Julio Flórez 
                                                   Colombiano

domingo, 22 de julio de 2012

PASIÓN





¡Háblame...! Que tu voz, eco del cielo,
sobre la tierra por doquier me siga...
Con tal de oír tu voz, nada me importa
que el desdén en tu labio me maldiga.

¡Mírame...! Tus miradas me quemaron,
y tengo sed de ese mirar, eterno...
Por ver tus ojos, que se abrase mi alma,
de esa mirada en el celeste infierno...!

¡Amame...! Nada soy... pero tu diestra
sobre mi frente, pálida, un instante,
puede hacer del esclavo arrodillado
el hombre-rey, de corazón gigante...

Tú pasas... y la tierra voluptuosa
se estremece de amor bajo tus huellas,
se entibia el aire, se perfuma el prado
y se inclinan a verte las estrellas.

Quisiera ser la sombra de la noche
para verte dormir sola y tranquila,
y luego ser la aurora... y despertarte
con un beso de luz en la pupila.

Soy tuyo, me posees... Un solo átomo
no hay en mi ser que para ti no sea:
dentro mi corazón eres latido,
y dentro mi cerebro, eres idea.


¡Oh! por mirar tu frente pensativa
y pálido de amores, tu semblante;
por sentir el aliento de tu boca
mi labio acariciar un solo instante;
por estrechar tus manos virginales
sobre mi corazón, yo de rodillas,
y devorar con mis tremantes besos
lágrimas de pasión en tus mejillas;

yo te diera... no sé... ¡no tengo nada...!
el poeta es mendigo de la tierra
¡toda la sangre que en mis venas arde!
¡todo lo grande que mi mente encierra!

Mas no soy para ti... ¡Si entre tus brazos
la suerte loca me arrojara un día,
al terrible contacto de tus labios
tal vez mi corazón... se rompería!

Nunca será... Para mi negra vida
la inmensa dicha del amor no existe...
Sólo nací para llevar en mi alma
todo lo que hay de tempestuoso y triste.

Y quisiera, morir... ¡pero en tus brazos,
con la embriaguez de la pasión más loca,
y que mi ardiente vida se apagara
al soplo de los besos de tu boca!
                                     Manuel María Flores
                                            Mexicano

                      


RETO



Si porque a tus plantas ruedo
como un ilota rendido,
y una mirada te pido
con temor, casi con miedo;

si porque ante ti me quedo
           extático de emoción,
piensas que mi corazón
se va en mi pecho a romper
y que por siempre he de ser
esclavo de mi pasión;

¡te equivocas, te equivocas!,
fresco y fragante capullo,
yo quebrantaré tu orgullo
como el minero las rocas.

Si a la lucha me provocas,
dispuesto estoy a luchar;
tú eres espuma, yo mar
que en sus cóleras confía;
me haces llorar; pero un día
yo también te haré llorar.

Y entonces, cuando rendida
ofrezcas toda tu vida
perdón pidiendo a mis pies,
como mi cólera es
infinita en sus excesos,

¿sabes tú lo que haré en esos
momentos de indignación?
¡Arrancarte el corazón
para comérmelo a besos!
                  Julio Flórez
                   Colombiano

NADA MÁS




Te quiero...
¿Quién inventó la mágica palabra
que tiene aromas y sabor de besos?

Mi corazón se ha puesto de rodillas
para decir: ¡Te quiero!

Desde que vivo en ti, con el asombro
del que arribara al clima de un lucero,
ante todo reclamo de la vida
mi corazón se ha vuelto sordo y ciego;
¡he muerto para el mundo de los hombres;
para el afán de mis anhelos viejos,
para la fiebre azul de la aventura,
y para el triunfo musical del verso!

¡Déjame repetirte que te quiero!

Te quiero por la dicha que me diste,
por el dolor que me dejaste luego,
por que hiciste ilusión las realidades
y convertiste en realidad los sueños...

Acaso tú sabrás por qué te quiero...

¡Yo no soy nada más que un corazón...
arrodillado frente a tu recuerdo! 


                                            Nelly Fonseca 
                                            Peruana 

Un poema es una melodía que enamora y seduce, que atrapa los corazones más duros y sana aquellos heridos por el desamor. Estas palabras llenas de amor, alegran corazones, abren las puertas de la felicidad y despiertan pasiones.
Si usted es de esas personas que tiene la necesidad de dar amor, pero no sabe como expresarlo, aquí encontrara como expresar ese sentimiento tan grande.